martes, 17 de abril de 2012

Semana 5 : Los Años Precursores


Cada 28 de Julio a todos lo peruanos nos embarga un sentimiento grandioso al recordar el momento más significativo para toda la nación: La independencia de nuestra patria del yugo español.

Pero en esta fecha no sólo es para evocar la memoria del gran libertador Don José de San Martín, sino que nos debe servir para recordar a todos aquellos hombres y mujeres que ofrendaron sus vidas en pos del grito de libertad, asi tenemos que recordar a todos los precursores y próceres de nuestra patria que no sólo con sus ideas combatieron la dominación que vivía nuestro pueblo, sino que además con sus acciones contribuyeron a fortalecer la conciencia de libertad en cada peruano.

En el presente instructivo se describe de manera sucinta a los próceres y precursores que lucharon para legarnos una nación no sólo con libertad, sino de ejemplo de perseverancia y de lucha que fue una verdadera Guerra de Reconquista contra el invasor español, lejos estuvo pues de ser una breve rebelión rápidamente sofocada como se ha querido hacer creer. Pues no es así, para ello haremos un recuento histórico de dicha acción revolucionaria iniciada en 1536, que abarcó el amplio territorio del Imperio de los Incas a lo largo de los años hasta 1821 de incansable batallar, donde se podrá notar la participación decidida de mestizos, incas e incluso criollos.

Es nuestra intención la de no sembrar rivalidad contra la raza española sino la ensalzar las proezas de nuestros antepasados que mucho de ello nos han legado y de lo cual debemos sentirnos más que orgullosos.


I. DEFINICIÓN DE PRECURSORES.
Fueron todos aquellos personajes de amplia visión que con sus ideas o acción propugnaron la independencia del Perú; preparando así el terreno para posteriores realizaciones o acontecimientos.

1.1. Principales precursores del Perú

Los personajes de amplia visión y acción que lucharon por la independencia del Perú son:

Juan Pablo Viscardo y Guzmán
José Baquíjano y Carrillo
José Hipólito Unanue y Pavón
•Mariano Melgar

Semana 4 : el Barroquismo


Durante los siglos XVII y XVIII los países iberoamericanos y el Perú en particular conocieron
el esplendor de un arte que había llegado desde los primeros momentos de la conquista y
que alcanzó entonces títulos propios e indiscutibles: el barroco. El barroco, más que un estilo
artístico, se convirtió en la expresión de un modo de vida. Una visión del mundo y la manifestación
de una civilización en sus más diversas gamas: arquitectura, pintura, escultura, literatura y, por cierto,
la música. El barroco impregnó la vida cotidiana de los hombres del Virreinato del Perú, marcó sus sentimientos y al
mismo tiempo los modos de expresarlos.

Tal vez, en ningún otro momento de la historia de Iberoamérica exista una reinterpretación tan vigorosa de técnicas y
valores provenientes de Europa, compartida por todos los pueblos del continente. Tuvo lugar una síntesis con formas
y manifestaciones aborígenes, así como maneras y estilos regionales peculiares y de notable originalidad.

El barroco persiste en el presente como trasfondo de la cultura viva, en manifestaciones tradicionales y populares cuyo
origen, justamente, se remonta a la época del virreinato. Estas manifestaciones son un testimonio del aporte de la Iglesia
Católica a la formación cultural del Perú y a la definición de su identidad.

Ante el imperativo de investigar, recuperar, preservar y difundir el patrimonio constituido por la música barroca existente
en los repositorios eclesiásticos peruanos, así como las expresiones de la cultura viva que se remontan en sus orígenes
a los siglos del virreinato, se decidió crear e impulsar el Proyecto Laudate (alabar mientras se canta) que luego se ha
perfeccionado como Perú Barroco, pasando la propuesta de la sola investigación a la difusión real en los ámbitos
nacional e internacional. La música occidental, en su continua evolución, ha ido recibiendo influencias de diferentes


partes del mundo y continúa en este proceso hoy en día.

Hanacpachap ha diseñado Perú Barroco para promover un mayor conocimiento de la evolución de la música occidental
luego del descubrimiento de un ‘eslabón perdido’ en su desarrollo en el Perú.

Semana 3 : Literatura de la conquista

El término literatura del descubrimiento y conquista, acuñado por Francisco Carrillo, designa el período que incluye todas las obras producidas durante el proceso de descubrimiento y conquista del Perú, inaugurado el 15 de noviembre de 1532 en Cajamarca con la captura del último Inca, Atahualpa y finalizado con la desestructuración del Imperio Incaico y la fundación de la ciudad de Lima- La literatura relacionada a este período, aunque no necesariamente escrita durante este marco temporal (como se ve en los últimos cronistas en tocar el tema), sí se vincula a los eventos desarrollados antes o durante este. Las principales manifestaciones literarias de este período son las crónicas, cartas de descubrimiento y relaciones. Los estudios literarios más importantes realizados sobre este período incluyen la Enciclopedia histórica de la literatura peruana de Francisco Carrillo y los diversos libros sobre los cronistas antiguos publicados por Raúl Porras Barrenechea.

A este gran grupo, se opone otro, denominado cronistas nativos y mestizos. Los cronistas nativos son miembros de élites regionales e incluso miembros de la familia real incaica, como Titu Cusi Yupanqui, que en 1570 escribiría la Relación de cómo los españoles entraron en Perú y el subceso que tuvo Mango Inca en el tiempo que entre ellos vivió, que aprendieron la cultura de los españoles y la utilizan para expresar (a través de la escritura) su vision no-oficial de la historia propia (muchos de ellos presentan crónicas que se remiten a la creación del mundo, las diferentes edades de la tierra, la guerras civiles entre los incas), la tradición y costumbres de sus pueblos, la conquista y los resultados de las colonias. Juan de Santa Cruz Pachacuti Yamqui Salcamaygua, escribe en 1613 la Relación de antigüedades deste reino del Peru y Felipe Guaman Poma de Ayala en su El primer nueva crónica y buen gobierno (sic. escrito entre 1585 y 1615, publicado en 1936) nos presentan el proceso de destrucción del mundo andino (debido a soberbia de los incas o falla en la comunicación con los españoles), tratan de explicar y presentar una alternativa a la realidad caótica que ven. La crónica de Juan de Santa Cruz Pachacuti destaca por un intento de explicar la cosmogonía incaica, su uso rudimentario del español (fuertemente quechuizado), pero no es sino Guaman Poma, en su crónica que es en realidad una extensa carta al rey de España, Felipe III, el que explica desde la creación del mundo hasta una propuesta de una sociedad utópica, dividida en cuatro reinos. Guaman Poma supone un cronista distinto, un momento único ya que no solamente se propone hacer un recorrido histórico del territorio peruano, sino que también lo hace de la Colonia (criticando duramente los abusos de autoridad de los sacerdotes, corregidores y la mezcla entre indios y españoles, Sánchez afirma que se trata de un j'accuse) y postula correcciones a este sistema. Se trata, retomando la idea expresada por Martin Lienhard, del primer cronista que asimila plenamente la letra (española) y la pone al uso de intereses propios. La crónica destaca, además, por su extensión; el manuscrito original está compuesto por 1179 hojas y por el uso, extenso e innovador de ilustraciones que relatan la realidad que el cronista nos va describiendo (son 398 dibujos).

Semana 2 : Literatura colonial



Literatura de la Colonia
CONTEXTO HISTÓRICO
.dependencia oficial ante España se inicia en 1542.

· Imposición de normas de vida, la religión católica, el idioma castellano, los sacaron de la actividad agrícola y los enviaron a trabajar a las minas
.Notoria influencia española en la producción literaria.

CARACTERÍSTICAS

Dependencia de España.- Eco de la literatura española porque se escribieron con espíritu y sentimientos españoles.
Alto valor histórico.- La literatura recogió testimonios del colonialismo que se implantó.
Estilo Satírico.- Se usó la sátira mordaz e hiriente para criticar a personajes virreinales.

PERIODOS

Barroco: Se le dio importancia a la lírica. Los poemas escritos en esa época poseen muchos recursos estilísticos.

Neoclásico: Rechazó el recargado lenguaje del barroco.

Clasicismo: Suplantó progresivamente al Barroco, dejando espacio al Romanticismo antes de renovarse a través del Neoclasicismo.

REPRESENTANTES

Representantes del clasicismo: Amarilis, Juan del Valle y Caviedes, y Diego Hojeda

Representantes del Barroco: Juan de Espinoza Medrano

Representantes del Neoclasicismo: Pedro Peralta y Barnuevo, y Concolorcorvo.


INCA GARCILAZO DE LA VEGA

(Garcilaso de la Vega, llamado El Inca; Cuzco, actual Perú, 1539 - Córdoba, España, 1616) Escritor e historiador peruano. Era hijo del conquistador español Sebastián Garcilaso de la Vega y de la princesa incaica Isabel Chimpo Ocllo. Gracias a la privilegiada posición de su padre, que perteneció a la facción de Francisco Pizarro hasta que se pasó al bando del virrey La Gasca, el Inca Garcilaso de la Vega recibió en Cuzco una esmerada educación al lado de los hijos de Francisco y Gonzalo Pizarro, mestizos e ilegítimos como él.

A los veintiún años se trasladó a España, donde siguió la carrera militar. Con el grado de capitán, participó en la represión de los moriscos de Granada, y más tarde combatió también en Italia, donde conoció al filósofo neoplatónico León Hebreo.

En 1590, muy probablemente dolido por la poca consideración en que se le tenía en el ejército por su condición de mestizo, dejó las armas y entró en religión. Frecuentó los círculos humanísticos de Sevilla, Montilla y Córdoba y se volcó en el estudio de la historia y en la lectura de los poetas clásicos y renacentistas. Fruto de esas lecturas fue la traducción del italiano que el Inca Garcilaso hizo de los Diálogos de amor, de León Hebreo, que dio a conocer en Madrid el mismo año de su retiro.

Siguiendo las corrientes humanistas en boga, Garcilaso el Inca inició un ambicioso y original proyecto historiográfico centrado en el pasado americano, y en especial en el del Perú. Considerado como el padre de las letras del continente, en 1605 dio a conocer en Lisboa su Historia de la Florida y jornada que a ella hizo el gobernador Hernando de Soto, título que quedó sintetizado en La Florida del Inca. La obra contiene la crónica de la expedición de aquel conquistador, de acuerdo con los relatos que recogió él mismo durante años, y defiende la legitimidad de imponer en aquellos territorios la soberanía española para someterlos a la jurisdicción cristiana.

El título más célebre de Garcilaso el Inca, sin embargo, fueron los Comentarios reales, la primera parte de los cuales apareció en 1609, también en Lisboa. Escrito a partir de sus propios recuerdos de infancia y juventud, de contactos epistolares y visitas a personajes destacados del virreinato del Perú, el relato constituye, pese a los problemas de sus fuentes orales y escritas y a las incongruencias de muchas fechas, uno de los intentos más logrados, tanto conceptual como estilísticamente, de salvaguardar la memoria de las tradiciones de la civilización andina. Por esta razón es considerada su obra maestra y se la ha reconocido como el punto de partida de la literatura hispanoamericana. La segunda parte fue publicada en Córdoba, en 1617.

Semana 1 : Literatura épica


La literatura quechua conoció un alto desarrollo en tiempos prehispánicos con numerosas formas líricas, épicas, narrativas y dramáticas o casi dramáticas. Se trata de un conjunto que no nos ha dejado textos escritos, pues solo lo ha hecho a través de la información y compilación realizada por algunos cronistas, predicadores y funcionarios coloniales. Fue por lo tanto, transmitida oralmente. Estas manifestaciones formaban parte del quehacer cotidiano. Funerales, fiestas, parrandas nupcias, peleas, guerras, entre otros. Estaban enmarcadas en una ritualización expresada a través de el arte.

Los primeros autores que usaron el quechua por lo menos parcialmente y fijaron las tradiciones oral en sus obras escritas, sobre todo en traducción castellana, fueron Felipe Guaman Poma de Ayala y Garcilaso Inca de la Vega. Para escribir el quechua se usaron modificaciones del alfabeto español.

Casi todos los textos quechuas de esta época fueron religiosos, entre ellos la Doctrina cristiana en castellano, quechua, aymara y puquina, el primer libro impreso en el Perú en 1584. Una excepción fue el manuscrito de Huarochirí escrito por encargo del obispo Francisco de Ávila para luchar contra la idolatría y el paganismo, que contiene mitos recopilados en la provincia de Huarochirí.

En la Colonia fueron también escritos los dramas anónimos Apu Ollantay, la Tragedia del fin de Atahualpa y una elaboración dramática del Hijo pródigo, que fueron representados en el teatro del Cusco a inicios del siglo XVIII.

Un poeta importante que luchó por la independencia y cayo en el combate contra los españoles fue Juan Wallparrimachi de Potosí, que pese a ser bilingüe escribió solamente en quechua.

Semana 1 : Literatura épica


La literatura quechua conoció un alto desarrollo en tiempos prehispánicos con numerosas formas líricas, épicas, narrativas y dramáticas o casi dramáticas. Se trata de un conjunto que no nos ha dejado textos escritos, pues solo lo ha hecho a través de la información y compilación realizada por algunos cronistas, predicadores y funcionarios coloniales. Fue por lo tanto, transmitida oralmente. Estas manifestaciones formaban parte del quehacer cotidiano. Funerales, fiestas, parrandas nupcias, peleas, guerras, entre otros. Estaban enmarcadas en una ritualización expresada a través de el arte.

Los primeros autores que usaron el quechua por lo menos parcialmente y fijaron las tradiciones oral en sus obras escritas, sobre todo en traducción castellana, fueron Felipe Guaman Poma de Ayala y Garcilaso Inca de la Vega. Para escribir el quechua se usaron modificaciones del alfabeto español.

Casi todos los textos quechuas de esta época fueron religiosos, entre ellos la Doctrina cristiana en castellano, quechua, aymara y puquina, el primer libro impreso en el Perú en 1584. Una excepción fue el manuscrito de Huarochirí escrito por encargo del obispo Francisco de Ávila para luchar contra la idolatría y el paganismo, que contiene mitos recopilados en la provincia de Huarochirí.

En la Colonia fueron también escritos los dramas anónimos Apu Ollantay, la Tragedia del fin de Atahualpa y una elaboración dramática del Hijo pródigo, que fueron representados en el teatro del Cusco a inicios del siglo XVIII.

Un poeta importante que luchó por la independencia y cayo en el combate contra los españoles fue Juan Wallparrimachi de Potosí, que pese a ser bilingüe escribió solamente en quechua.